San Sebastián, 3 nov (EFE).- La Real Sociedad ya ha superado el bajón que supuso su derrota contra el Celta, en la pasada jornada, y prepara desde hoy su partido ante la U.D. Las Palmas, «con ganas y mucha hambre», el central Mikel González.
Los donostiarras se juegan mucho en este encuentro y su entrenador, David Moyes, más todavía porque, acuciado por los malos resultados, su puesto está en entredicho en vísperas de un nuevo parón liguero, aunque González apuesta por el triunfo blanquiazul.
«Queremos sumar 12 puntos antes del siguiente parón», ha asegurado el futbolista guipuzcoano que ha augurado un partido «intenso y duro» y que anticipa que «los puntos van a estar muy caros».
El central realista considera que el actual es un momento para estar unidos y olvidarse de los malos resultados que no le han permitido arrancar en la clasificación a su equipo y por eso ha dejado claro que «no vale la pena mirar hacia atrás» y que sólo hay que pensar «en ir allí a por los tres puntos».
Mikel González no tiene garantizada su titularidad ya que, después de los tres goles que encajó su equipo ante el Celta el pasado sábado, la línea defensiva ha sido cuestionada y podría retornar al once titular el mexicano Diego Reyes.
Varios jugadores realistas además tienen complicada su presencia en este partido porque han salido de alguna lesión, como Alberto De la Bella o Esteban Granero, y otros, como son los casos de David Zurutuza o Joseba Zaldua, acaban de lesionarse y serán baja para este encuentro.
