Tegucigalpa, 18 dic (EFE).- El Honduras Progreso buscará mañana ganar su primer campeonato en su propia cancha, en la que recibirá al Motagua, de Tegucigalpa, que llegará con la idea de regresar con su copa decimocuarta desde que se fundó la Liga Profesional en 1965.
La moneda está en el aire para los dos equipos, que el sábado pasado empataron a tres goles el primer partido de la final disputado en el Estadio Nacional de Tegucigalpa.
Dirigidos por Héctor Castellón, el Honduras Progreso jugará su partido más importante del torneo Apertura, en el que fue líder durante los 18 partidos de las dos vueltas regulares.
Después, en la segunda fase, eliminó al Vida, lo que le dio el pase para jugar la final con el Motagua, que hizo lo mismo con el Olimpia, último campeón.
A la final del campeonato han llegado los dos equipos que mejor nivel de juego mostraron durante las dos vueltas.
El Honduras Progreso, que regresó a la primera división en 2011, tras haber descendido en 1969, tiene su sede en la ciudad de El Progreso, departamento de Yoro, en el norte del país centroamericano.
El Motagua, de Tegucigalpa, que tiene como timonel al argentino Diego Vásquez, con quien ganó la decimotercera copa en 2014, fue fundado en 1928 y es uno de los pocos equipos hondureños que nunca ha descendido a la segunda división.
Si mañana el partido finaliza en su tiempo reglamentario con empate, se jugarán 30 minutos adicionales.
De persistir la igualdad en el marcado tras el tiempo adicional, el campeonato se definirá en tanda de penaltis.
