Berlín, 3 dic (EFE).- El RB Leipzig se impuso por 2-1 al Schalke con lo que se mantiene como líder en la Bundesliga, tras trece jornadas jugadas y con tres puntos de ventaja sobre el Bayern Múnich.
El Bayern había asaltado el viernes provisionalmente el liderato, el derrotar a domicilio al Maguncia, pero el Leipzig soportó hoy la presión y volvió a ponerse en el primer lugar con su victoria en casa.
El Leipzig se encontró, en parte, con la conocida como la suerte del líder, al imponerse con un penalti dudoso y un gol en propia puerta del Schalke. Aunque en la segunda parte tuvo ocasiones para aumentar la ventaja.
En la primera jugada del partido el meta del Schalke, Ralph Fährmann, se vio involucrado en un mano a mano con Timo Werner y el árbitro sancionó penalti pese a que no estuvo nada claro que hubiera contacto.
Las protestas del Schalke fueron exaltadas pero no hubo nada que hacer. El propio Werner asumió el cobro y marcó con lo que el Schalke se vio con el marcador en contra apenas al comenzar el partido.
La reacción tardó en llegar ante un equipo que da pocos espacios y que lanzaba avances rápidos y peligrosos cada vez que recuperaba la pelota.
Poco a poco, el Schalke fue encontrando una fórmula para llegar, con cambios de frente para superar la presión del Leipzig. En el 31 llegó el empate por intermedio del bosnio Sead Kolasinac, que marcó a puerta vacía tras recoger un rebote después de un disparo de Leo Goretzka.
Al comienzo de la segunda parte, el Leipzig volvió a irse en ventaja con gol en propia puerta de Kolasinac que derrotó a su propio portero al tratar de despejar de cabeza una falta lanzada por Emil Forsberg.
Después el Leipzig se adueño del partido, mantuvo alejado al Schalke de su portería y tuvo buenas ocasiones para aumentar que, sin embargo, no concretó.
Ya antes el Borussia Dortmund había derrotado por 4-1 al Borussia Mönchengladbach en su último partido antes del duelo por el primer lugar del grupo de la Liga de Campeones que disputará la próxima semana contra el Real Madrid.
El comienzo del partido fue vertiginoso y el Gladbach abrió el marcador en el minuto 6 con un remate desde la media luna del brasileño Raffael que aprovechó un mal despeje de cabeza de Marc Batra.
El Dortmund respondió de inmediato y empató en el minuto 7 por intermedio de su goleador Pierre Emerick Aubameyang, a pase de Marco Reus y tras una jugada iniciada en el centro del campo por el francés Ousmane Dembelé, que, con el correr de los minutos, se convertiría en el mejor jugador del partido.
En el minuto 16 el Dortmund se fue en ventaja, con un remate de cabeza del polaco Lukas Piszczek tras un saque de esquina, y a partir de ese momento controló el partido sin dificultades para sentenciarlo luego en la segunda parte.
Dembelé hizo el cuarto, en el 64, a pase de Reus, tras deshacerse de Mohamed Dahoud con un regate y Aubameyang cerró la cuenta en el 68 en la mejor jugada del partido, iniciada por Dembelé y con pase de tacón de Reus incluido.
La victoria no le permitió remontar muchas posiciones al Dortmund -que ahora es quinto- debido a que el Hertha y el Hoffenheim también ganaron sus partidos.
El Hoffenheim goleo por 4-0 al Colonia, con doblete de Sandro Wagner y el Hertha venció a domicilio al Wolfburgo (2-3) gracias a un penalti en el minuto 90 convertido por Salomon Kalou.
En la lucha por eludir el descenso el Werder Bremen se dio un respiro al derrotar por 2-1 al Ingolstadt.
El Bayer Leverkusen sigue atascado en la mitad de tabla y hoy no logró pasar de un modesto empate en casa a un gol ante el modesto Friburgo.