Berlín, 11 dic (EFE).- El presidente del Bayern Múnich, Uli Hoeness, considera imposible poner un límite al negocio económico del fútbol y se muestra convencido de que pronto habrá un traspaso de más de 150 ó 200 millones de euros, en el que podría estar implicado el jugador del Barcelona Lionel Messi.
En una entrevista con el diario «Bild» tras regresar a la presidencia del Bayern después de pasar 21 meses en prisión por evasión de impuestos, Hoeness recuerda que se equivocó cuando hace unos años pensó que ya no se podía mover más dinero en el fútbol.
Y pone un ejemplo: «Si el Bayern juega contra el Dortmund y con ellos juega un chino y con nosotros juega un chino, y cada chino que lo ve en internet paga un euro, y 300 chinos se conectan, tenemos una nueva situación: 300 millones de euros en un día».
Sobre la situación del Bayern, Hoeness asegura que aprecia muchísimo al entrenador Carlo Ancelotti, al que califica de «hombre simpático y fantástica persona», pero reconoce que le molesta que los medios le presenten como un «anti-Pep», por sus diferencias con Guardiola, su antecesor en el banquillo.
Hoeness rechaza las comparaciones que presentan al catalán como «maleducado» o «demasiado crítico» con los jugadores y a Ancelotti como un santo.
«Me ha enfadado mucho. Soy muy amigo de Pep. Me imagino que lo seré al final de Ancelotti. Pero no se puede decir después de tres semanas, sino al final», añade.
Sobre el futuro de Lewandowski, cuyo agente ha revelado que está a punto de renovar hasta el 2021, Hoeness recuerda que su contrato no acaba hasta el 2019, pero reconoce que las conversaciones están avanzadas y no cree que haya grandes problemas.
Se muestra además bastante seguro de la continuidad de Arjen Robben.
El holandés, con contrato hasta junio de 2017, está «totalmente tranquilo», apunta el director del Bayern tras señalar que se encontró hace poco con su padre y éste le dijo que hablarán en la pausa de invierno para consensuar una solución.
Preguntado sobre la negociación con el francés Frank Ribéry para renovar con el club por un año más, hasta junio de 2018, Hoeness señala que desconoce los detalles, pero se muestra satisfecho.
«Cuando Frank está sano, siempre es un enriquecimiento. También porque es querido por la afición», añade el presidente del club, convencido de que un equipo, además de los mejores jugadores, necesita a personas con las que los seguidores se sientan identificados, como Ribéry.