El Atlético de Madrid ha anunciado este jueves un «principio de acuerdo» con el Chelsea inglés para el traspaso del delantero hispanobrasileño Diego Costa, «pendiente del reconocimiento médico y la formalización de su contrato», según ha indicado el club en su página web.
El delantero, que fue rojiblanco entre 2007 y 2014, cuando marchó al club londinense, viajará en los próximos días a Madrid con permiso del Chelsea para someterse a un reconocimiento médico y concretar su contrato con el Atlético.
Tras el principio de acuerdo entre los dos clubes, que ha sido confirmado también por el Chelsea, si el examen médico del jugador -que ha estado apartado de la pretemporada del equipo londinense y se ha ejercitado en solitario en Brasil- es satisfactorio, y Costa acuerda el contrato con el club rojiblanco, se producirá el regreso del ariete que el equipo técnico dirigido por el argentino Diego Simeone deseaba desde hace más de un año.
No obstante, este reencuentro no se podrá ver sobre el terreno de juego hasta el mes de enero, ya que hasta entonces el club rojiblanco tiene prohibida la inscripción de jugadores por una sanción de la FIFA, ratificada por el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS).
Un retorno deseado también por el jugador, que aseguró tras el amistoso entre España y Colombia del pasado 7 de junio que el entrenador del Chelsea, el italiano Antonio Conte, no contaba con él.
«El entrenador (Conte) no me quiere ahí. No sé por qué. Pensará que he hecho una temporada mala. Me ha mandado un mensaje. Un simple mensaje después de todo lo que he hecho ahí. A buscar equipo y ya está. Si no cuentan conmigo, hay que salir», aseguró Costa
El delantero no ha ocultado su deseo de volver al Atlético, que ha mostrado tanto en declaraciones públicas como en sus redes sociales, en las que este pasado verano apareció con la camiseta del club madrileño.
Su intención de salir del Chelsea ha sido tal que en agosto anunció a través de su representante, Ricardo Cardoso, su intención de pedir el ‘transfer request’, la carta mediante la cual el jugador de un equipo pide formalmente al club con el que tiene contrato una petición de traspaso y abandonar la entidad.
Finalmente, el acuerdo entre el Chelsea y el Atlético anunciado hoy permitirá el regreso de un delantero clave en la conquista de la última Liga del Atlético, en el curso 2013-14.
Diego Costa, por el que el Chelsea pagó al Atlético los 38 millones de euros de su cláusula de rescisión el 1 de julio de 2014, ha jugado en el club londinense en las últimas tres temporadas, en las que disputó 120 encuentros oficiales, marcó 59 goles, dio 19 asistencias a sus compañeros y ganó la ‘Premier’ hace dos meses.
Ahí llegó por su deslumbrante temporada 2013-14 con el Atlético. Aquella campaña, la última hasta su regreso ahora al club, ganó la Liga, fue finalista de la Liga de Campeones y fue el líder ofensivo del equipo, con 36 tantos en 51 encuentros: 27 en 35 duelos de Liga; ocho en nueve choques europeos; y uno en cinco partidos de la Copa.
Un año impactante que aún sigue en la memoria de los aficionados del equipo rojiblanco, con el que también ha ganado una Copa del Rey, en 2013 al Real Madrid con uno de los dos goles suyo, y una Supercopa de Europa, en agosto de 2012 precisamente al Chelsea, aunque su viaje hacia la titularidad en el Atlético fue largo.
La temporada 2012-13, ya con el argentino Diego Simeone al mando del Atlético, fue la explosión en Europa del delantero, que pasó de suplente a titular indiscutible y que terminó el año, además de con el trofeo de Copa en el Santiago Bernabéu, con un buen volumen de goles, 21 en 44 encuentros, y con un papel principal en el equipo.
El delantero se lo ganó a golpe de goles, carreras, potencia, regates y entrega. Y lo hizo cinco años después de su fichaje por el Atlético, cuando tenía 18 y jugaba en la Liga portuguesa.
Tardó tres años y medio en jugar su primer partido oficial con el conjunto rojiblanco, hasta 2010-11, porque los primeros tres años fue cedido al Celta (2007-08) y al Albacete (2008-09) y traspasado en 2009-10 al Valladolid, del que fue recomprado para el siguiente ejercicio.
En el verano de 2010 regresó a la plantilla del Atlético con un futuro incierto, pero salió ganador del debate en el club sobre la elección para la última plaza de extra-comunitario de la plantilla entre él y el argentino Eduardo Salvio, que fue cedido al Benfica. Aquella campaña, con Quique Sánchez Flores como técnico, jugó ya 39 choques, 19 de ellos en el once, y logró siete goles de rojiblanco.
Al verano siguiente, una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla frenó de nuevo su progresión. Estuvo seis meses de baja. Aquel enero fue cedido al Rayo Vallecano, jugó 16 encuentros, acumuló diez goles y tomó el impulso definitivo para triunfar en el Atlético de Simeone, con el que se reencontrará tres años después.