La selección de Alemania tuvo el mayor fracaso de su historia reciente y de favorito al título resultó en todo un fiasco al perder por marcador de 2-0 contra una Corea del Sur que ya llegaba eliminada al partido.
Los alemanes jamás pudieron reaccionar para abrir el caparazón coreano que de hecho marcó sus goles en tiempo de compensación al final del partido.
Ese resultado rescató a un desdibujado México que en el segundo tiempo se cayó frente a Suecia y perdió 3-0, incluido un autogol.
Suecia es primer lugar de grupo y México en segundo. Y así, desde 1994 ha clasificado consecutivamente a la fase de octavos de final.