Messi y Rojo se vistieron de héroes en el duelo que clasificó a la Albiceleste a los octavos de final de la Copa del Mundo eliminando a Nigeria en los últimos minutos del encuentro.
Simplemente la Selección argentina se murió en el terreno de juego, más garra y corazón que calidad y técnica mostraron en el partido que definía al segundo lugar del grupo D.
Primero, Messi apareció al cuarto de hora del primer tiempo, y después, Marquitos Rojo fue el hombre de la hazaña en el minuto 87.
El siguiente rival de Argentina será ante Francia, una auténtica guerra en Rusia 2018.
Argentina revive y sueña