Zlatan Ibrahimovic puede hacer todo. Si hay que rescatar al Galaxy en la MLS, quien más si no Zlatan. Si el Real Madrid necesita salir de su crisis, hay que llamar a Zlatan. Si Mourinho requiere un delantero para salvar su chamba en el Manchester United, entonces hay que fichar a Ibra y si el rating de James Corden, se viene abajo, entonces hay que invitar a Zlatan al show.
El tercer reto causó euforia en el público, pues puso a prueba sus dotes como bailarín, ya que el presentador le pidió hacer el «Floss Dance» y el sueco dio cátedra, incluso trató de enseñarle a James, pero evidenció que éste es un poco tronco y se perdió a la primera. Prueba súper superada.