www.futbolmundial.com Tiburones Rojos del Veracruz estuvo a punto de sacarle tremendo susto al Cruz Azul que viene enganchado en una crisis de malos resultados, no obstante un autogol a 15 minutos del final le dio a la Máquina Cementera el empate con lo cual por lo menos rompen racha de derrotas.
El encuentro fue el que abrió, junto con dos partidos más, la jornada del Torneo de Clausura 2019 de la Liga MX, ante poco más de 17 mil aficionados presentes en el estadio Luis “Pirata“ Fuente de la capital veracruzana.
Los Tiburones dieron el primer aviso al minuto 3. Kazim Richards mandó centro al corazón del área, pero Cristian Menéndez no alcanzó a rematar. Era el minuto 3. La respuesta celeste se dio con la dupla Elías Hernández y Jonathan Rodríguez, el uruguayo remato, pero Sebastián Jurado hizo una gran atajada.
Al 23′, Menéndez volvió a poner peligro, pero Jesús Corona rechazó adecuadamente. Sin embargo, la tercera fue la vencida para los anfitriones y Kazim Richards puso adelante a los jarochos con un testarazo a pase de Bryan Carrasco. Era el minuto 29.
Así terminó la primera parte. Al 54′, Jesús Paganoni exigió a Corona con un disparo potente, pero el cancerbero recostó y desvió a tiro de esquina. Pedro Caixinha decidió arriesgar e hizo tres modificaciones ofensivas en busca de la igualada.
El esfuerzo tuvo su premio al 72′. Milton Caraglio remató, el balón rebotó en Fabricio Silva y el brasileño anotó en propia puerta. Era el 1-1. Los Cementeros estaban encima. Sebastián Jurado hizo una atajada impresionante con el pie tras un remate de Igor Lichnovsky dentro del área chica al 78′.
La Máquina terminó jugando en territorio rival, puso muchos balones en el área, pero Sebastián Jurado se convirtió en figura e impidió la caída de su marco. No hubo más. Veracruz y Cruz Azul dividieron unidades.
Con este resultado, los Tiburones llegaron a tres puntos mientras que los Cementeros arribaron a nueve unidades.