Una vez en Oviedo, pisó la que será su cancha hasta final de temporada
«Tengo que dar las gracias a la afición por apoyarme así y recibirme tan bien como lo ha hecho. Estoy listo para empezar a buscar esos triunfos y meter goles para que estén un poco más cerca», señaló el oviedista en declaraciones al club.
La perla del futbol azteca aterrizó en el aeropuerto de Asturias en torno a las tres de la tarde, acompañado de su padre Rubén Flores, y acto seguido acudió al Carlos Tartiere para estampar su firma en el contrato y avanzar su incorporación a la dinámica oviedista, pendiente sólo del reconocimiento médico.
Una vez en Oviedo, pisó la que será su cancha hasta final de temporada y lo hizo luciendo también la camiseta que lucirá esta campaña, en la que ya está estampada su nombre con el dorsal número 19 a la espalda.