Lo menos que se puede pedir a un equipo como Pumas es que tengan un plantel fuerte
Lo menos que se puede pedir a un equipo como Pumas es que tengan un plantel fuerte. No son magnates como Rayados o Tigres, pero su historia los obliga a eso: a pelear con dignidad. Y en este torneo en particular se han terminado los pretextos y el victimismo. Tienen que dar resultados y Mejía Barón lo sabe. El Doctor —apodo que proviene de su título como cirujano dentista expedido por la UNAM— bebió de la gloria auriazul como jugador y entrenador. Es todo un hombre de la casa.
«Le gusta que el jugador cuide los pequeños grandes detalles que son la diferencia entre ganar y perder y es un gran observador tanto dentro como fuera de la cancha de los muchachos. Tiene las maneras de hablar con ellos, también tiene una buena visión de lo que es futbolísticamente el equipo, creo que es un buen apoyo para Andrés Lillini», dijo Miguel España, referente histórico de Pumas, en entrevista con El Economista.