https://www.futbolmundial.com/ Doha, principal sede del Mundial de Qatar 2022, es una capital moderna de perfil futurista en la que los rascacielos, edificios de diseño, calles y paseos remodelados al completo para el evento mundialista nos sitúan en una urbe marcada por una perfección y pulcritud extremas, que contrastan con la tradición e historia de un pueblo de tribus migratorias que tiene en el zoco, el Souq Waqif, su corazón.
Pero como todo en Catar, el zoco es también de reciente creación. Ideado a finales del siglo XIX como centro neurálgico de comercio e intercambios de ganado entre beduinos y comerciantes, el Souq Waqif (cuyo significado puede ser el de “mercado de a pie”) que ahora podemos ver se terminó en 2008 y engloba al antiguo barrio de AlYassra, la zonas de mayor actividad pesquera, varios cementerios en los que hoy se encuentra un enorme parking subterráneo y una parte ganada al mar.
Lo primero que llama la atención es su peculiar arquitectura, realizada de forma tradicional para preservar el encanto de tiempos pasados y, sobre todo, paliar las altísimas temperaturas del verano, usando barro en su estructura y madera y bambú para su techumbre.
El Zoco: principal atracción turística
Se trata del principal reclamo para los turistas que acudan a Doha para el Mundial de Qatar 2022. Al ser tan reciente su construcción, la sensación es de decorado de película o de estar en una atracción de un parque temático, pero es solo una primera impresión.
En este lugar todo es perfecto. Encantador. Farolillos de luz tenue en las fachadas, placitas llenas de vida o su laberíntico entramado de calles resguardadas, con miles de tiendas de todo tipo de productos, desde camisetas de fútbol, telas o especias, hasta las codiciadas y afamadas perlas, joyas, oro o animales de todo tipo. En Souq Waqif es imposible no sentirse en otro mundo.
Las personas que forman parte del lugar, la historia de cada pequeña tienda, los aromas de sus especies, la zona de venta de halcones o su variada gastronomía, que engloba desde el mejor street food de la región hasta restaurantes de postín, hacen del zoco catarí un lugar imprescindible.
“Es un mercado real desde hace más de 100 años. Todavía lo utilizan los cataríes. Por supuesto, también es una gran atracción turística. Definitivamente si viniera a Catar iría a uno de los restaurantes de la zona. Encontrarás todo tipo de cocina, de Irán o de cualquiera de los países vecinos”, destaca Berthold Trenkel, Director de operaciones de Turismo de Catar.
Trenkel, apasionado de la fotografía, recomienda recorrer la zona “dejándose asombrar: Creo que ese es el principal objetivo cuando se visita Catar. Es un país muy moderno pero profundamente arraigado a su cultura y su patrimonio. Hay que llegar abierto a cosas nuevas, probar nuevas comidas, nuevas experiencias y, por supuesto, disfrutar de la Copa del Mundo”.
Y es que el zoco catarí es el lugar perfecto para despertar los cinco sentidos: