Real Madrid le quedaba el último arreón y perdonó cuando Vinícius cabeceó en el área chica
Pudo sentenciar a la carrera a los 64 minutos, cuando Traoré, escorado se presentó en un mano a mano ante Lunin que adivinó sus intenciones en el recorte, se lanzó por el balón que no logró blocar, y con todo a favor el delantero disparó al travesaño.
El mérito de luchar de unos jugadores cuyas vidas y preocupaciones las marca la guerra que destroza su país. Partido como nunca en la temporada el equipo de Ancelotti, Kroos se desgañitaba pidiendo esfuerzos defensivos a los de arriba. Mientras, Zubkov seguía a lo suyo, complicando a Lunin con un disparo lejano que se envenenó con un bote y Mudryk apareciendo siempre con peligro.
Al Real Madrid le quedaba el último arreón y perdonó cuando Vinícius cabeceó en el área chica un centro preciso de Lucas Vázquez, con Rüdiger en su primer intento a pase de Kroos en el tiempo añadido hasta que los mismos protagonistas firmaron el tanto del empate en el último suspiro. La conexión alemana daba el pase a octavos con Rüdiger jugándose el físico en un choque espeluznante con el que evitó la primera derrota del curso. El aviso antes del clásico estaba captado.