Croacia está profundizando en otra Copa del Mundo, y el equipo está tomando el camino largo una vez más.
El portero Dominik Livakovic detuvo tres tiros penales en la victoria de Croacia por 3-1 sobre Japón en una tanda de penaltis el lunes, asegurando el regreso a los cuartos de final para el subcampeón del torneo de 2018. El partido estaba empatado 1-1 después de la prórroga.
En su sorpresiva carrera hacia la final en Rusia hace cuatro años, Croacia necesitó tiempo extra en cada ronda de la fase eliminatoria, y dos veces pasó por la tanda de penales.
“La historia sigue repitiéndose”, dijo con una sonrisa el entrenador de Croacia, Zlatko Dalic.
Livakovic fue el portero suplente de Danijel Subasic en 2018, pero esta vez tomó el centro del escenario, lanzándose a su izquierda para evitar el primer penalti de Japón de Takumi Minamino, a su derecha para bloquear el esfuerzo de Kaoru Mitoma en el segundo penalti, y luego nuevamente a su derecha. negar a Maya Yoshida en el cuarto.
Eso le dio a Mario Pasalic la oportunidad de anotar el penalti decisivo. El suplente se unió al resto de los jubilosos jugadores croatas y se dirigió directamente a Livakovic después de golpear el fondo de la red.
“En Croacia, hacemos las cosas de esta manera”, dijo Livakovic. “Continué con la tradición”.
Las similitudes con 2018 no se detienen ahí. Al igual que en todos los partidos de la fase eliminatoria de ese año, Croacia se quedó atrás ante Japón cuando Daizen Maeda barrió a corta distancia a los 43.
Ivan Perisic empató al encontrar un centro de Dejan Lovren desde la derecha con un cabezazo al ángulo desde cerca del punto de penalti a los 57.
Dalic dijo que la capacidad de su equipo para recuperarse de posiciones perdidas “refleja al pueblo croata”, con un guiño a la psique que los jugadores forjaron al crecer en un país devastado por la guerra cuando la ex Yugoslavia se dividió en la década de 1990.
“Nunca nos rendimos… Hemos pasado por mucho dolor y los jugadores están muy orgullosos”, dijo Dalic. “Toda Croacia nos está apoyando y esta es una forma de darles fe en un mañana mejor”.
Mientras Croacia, también semifinalista en 1998, se prepara para enfrentarse a Brasil o Corea del Sur en los cuartos de final, Japón sale de una Copa del Mundo en los octavos de final por cuarta vez, al igual que en 2002, 2010 y 2018. El equipo asiático también perdió en una tanda de penales a Paraguay en esa etapa de 2010.
Asia todavía está esperando un segundo equipo para avanzar más allá de los octavos de final, después de que Corea del Sur en su tierra natal en 2002.
Sin embargo, Japón dejó su huella en Qatar, venciendo a Alemania y España, dos de los últimos tres campeones de la Copa del Mundo, en grandes sorpresas en la fase de grupos.
“Creo que los jugadores mostraron una nueva era del fútbol japonés”, dijo el entrenador de Japón, Hajime Moriyasu. “Deberían usar este sentimiento de estar molestos e intentar ir más allá la próxima vez.
“No podemos ser superhéroes de una sola vez. Tenemos que mejorar paso a paso. Pero Japón está alcanzando un nivel en el que podemos jugar en el escenario mundial”.
El resultado garantiza al menos un partido más de la Copa del Mundo para el capitán de Croacia, Luka Modric, de 37 años, uno de los mejores centrocampistas de su generación. El jugador mundial del año 2018 tuvo un juego tranquilo, salvo por un pase con la parte exterior de su pie derecho que envió a Perisic fuera para un tiro a puerta en la primera mitad.
Modric fue sustituido en la primera mitad de la prórroga y no participó en la tanda de penaltis.
LA CONFIANZA DEL ENTRENADOR
Dalic nunca dudó de Livakovic en el tiroteo. “Ayer, durante el entrenamiento, practicamos tiros penales y realmente paró muchos tiros”, dijo Dalic. “Entonces, cuando comenzamos el tiroteo, tenía mucha confianza. Demostró ser como Subasic en Rusia”. Tres de los cuatro lanzadores de penaltis de Croacia fueron suplentes.
LA RESISTENCIA DE CROACIA
Desde 1998, todos los partidos eliminatorios de Croacia en una Copa del Mundo o un Campeonato de Europa se han ido a la prórroga, excepto la derrota en la final de la Copa del Mundo de 2018 ante Francia.
RÉCORD DE GOLEADOR
Con su gol, Perišić se convirtió en el primer jugador croata en marcar 10 goles en torneos importantes.
