En París las aguas bajan más turbias
Los bávaros, que no conocen la derrota desde septiembre, parecen haber superado un bache de juego y su identidad, lo que les ha reforzado en el liderato, aunque el Union Berlín les pise los talones.
En París las aguas bajan más turbias. Como cada año cuando se acerca la Liga de Campeones, las estructuras del club comienzan a temblar y las enormes expectativas que la lluvia de millones cataríes atraen al club francés generan tensión en todos los niveles.
El club tiene como objetivo claro la Liga de Campeones y un tropiezo en esa competición,
uno más, volvería a dejar al equipo en un limbo difícil de aceptar.