https://www.futbolmundial.com/ Los clubes de Milán se enfrentarán nuevamente en otra semifinal de la Liga de Campeones una década después de su último encuentro en los cuatro finalistas de la competencia de clubes de élite de Europa.
El Inter de Milán empató 3-3 contra el Benfica el miércoles para completar una victoria global de 5-3 sobre el equipo portugués. Eso ocurrió un día después de que el AC Milan se impusiera al Napoli en los cuartos de final.
Después del primer gol de Nicolò Barella con el Inter, Fredrik Aursnes devolvió algo de esperanza al Benfica poco antes del medio tiempo. Pero Lautaro Martínez y el suplente Joaquín Correa anotaron en la segunda mitad para ayudar al Inter a alcanzar su primera semifinal desde que José Mourinho lo llevó al triplete de la Liga de Campeones, la Serie A y la Copa de Italia en 2010.
El Inter de Milán empató 3-3 contra el Benfica el miércoles para completar una victoria global de 5-3
Sin embargo, el Inter logró ceder una ventaja de dos goles cuando António Silva y Petar Musa anotaron tarde para el Benfica.
“Obviamente estoy feliz y estoy feliz por los muchachos porque es un logro importante e histórico”, dijo el entrenador del Inter, Simone Inzaghi. “Hemos recorrido un largo camino, desde un grupo muy, muy difícil.
“En cuanto a los goles, su delantero lo hizo bien en el segundo gol y en el tercero escuchamos un silbato y varios jugadores pararon. Por supuesto, me hubiera gustado ganar 3-2 y estoy más decepcionado por los muchachos, pero ya estábamos en la semifinal y también hubo ese pitido que escuchamos en el banquillo… habríamos merecido la victoria”.
Los nerazzurri se enfrentarán a su rival de ciudad en una repetición de la semifinal de 2003. AC Milan ganó eso con goles fuera de casa y luego venció a Juventus en la final.
“Es un partido muy especial, sabemos lo que significa jugar un partido de este tipo”, dijo el delantero del Inter Martínez. Ahora tenemos que volver a sumar puntos en la Serie A y luego pensaremos en la Champions.
“Juego este deporte para ganarlo todo”.
El Real Madrid se enfrentará al Manchester City en la otra semifinal después de que el equipo inglés empató 1-1 en el Bayern de Múnich el miércoles para avanzar 4-1 en el global.
Tanto el Inter como el Benfica llegaron al partido en San Siro en una mala racha.
Inter solo había ganado uno de sus últimos ocho partidos en todas las competiciones, el partido de ida en Lisboa, mientras que Benfica había perdido tres partidos seguidos por primera vez desde la temporada 2018-19.
Inter había sido criticado por no aprovechar al máximo sus numerosas oportunidades de gol, y solo había marcado dos goles en juego abierto en sus últimos siete partidos.
Pero los nerazzurri tomaron la delantera con su primera oportunidad, en el minuto 14, cuando Barella montó una entrada y jugó un uno-dos con Martínez antes de lanzar un delicioso esfuerzo en la esquina superior izquierda.
El Benfica se enfrentó a una tarea cuesta arriba y el Inter aún no concedía en los octavos de final. Los nerazzurri volvieron a tener el balón en el fondo de la red en el 33′ pero fue anulado por un ligero empujón de Martínez sobre Gilberto.
Momentos después, Barella hizo bien en despejar acrobáticamente un centro con el máximo goleador del Benfica, Gonçalo Ramos, al acecho.
Sin embargo, un lapso defensivo hizo que el Benfica volviera a los cuartos de final a siete minutos del descanso cuando Aursnes se adelantó a Denzel Dumfries para cabecear un centro de Rafa Silva desde la derecha.
Animado por ese gol, el Benfica siguió presionando pero fue el Inter el que marcó en el minuto 65,
para dejar el resultado fuera de toda duda.
Henrikh Mkhitaryan cortó un pase desde la izquierda a Federico Dimarco,
quien centró para el remate más fácil cuando Martínez empujó el techo de la red a quemarropa.
Y Correa coronó una noche brillante para el Inter con un tiro desde el poste derecho dos minutos después de salir desde el banquillo.
António Silva cabeceó un tiro libre para los visitantes con cuatro minutos para el final para agregar algo de respetabilidad al marcador,
antes de que Musa atravesara un mar de piernas en el tiempo de descuento para al menos poner fin a la racha negativa del Benfica.
“Estamos decepcionados porque creo que al principio demostramos que todavía creíamos que podíamos llegar a la semifinal”, dijo el entrenador del Benfica, Roger Schmidt. “Empezamos muy bien pero después del primer gol fue difícil porque eso complica todo aún más.
“Creo que nuestro equipo mostró una muy buena actitud hoy, muy buen enfoque y muy buena mentalidad… Intentamos presionar en la segunda mitad pero luego concedimos un gol y creo que tampoco tuvimos mucha suerte con las decisiones”.
