El pasado 1 de octubre, Claudia Sheinbaum asumió oficialmente la Presidencia de México y tendrá a su cargo el mandato hasta el año 2030. Durante su administración, México será uno de los tres países anfitriones de la Copa Mundial de la FIFA 2026, junto a Estados Unidos y Canadá, en lo que será el primer torneo en contar con tres sedes.
Como jefa de Estado, Sheinbaum no solo supervisará los últimos detalles gubernamentales en temas de infraestructura y seguridad, sino que también, según los estatutos de la FIFA, será invitada a la ceremonia de inauguración y a la premiación del campeón en el partido final del torneo. Estos eventos son de gran relevancia simbólica, y la presencia de los Jefes de Estado en el podio forma parte de la tradición de la FIFA.
En las ediciones pasadas, en Rusia 2018, el presidente Vladimir Putin estuvo presente junto al presidente de la FIFA, Gianni Infantino, para entregar el trofeo. Mientras que en 2022, el Emir de Qatar, Tamim bin Hamad Al Thani, colocó el ‘bisht’ a Lionel Messi, quien levantó el trofeo como campeón del mundo.
Claudia Sheinbaum se convertirá, por tanto, en la primera Presidenta de México en participar en la ceremonia de premiación de una Copa del Mundo, un evento que marcará la historia deportiva del país.