https://www.futbolmundial.com/ El AC Milan volvió a escribir una página dorada en su historia al proclamarse Supercampeón de Italia tras una espectacular remontada frente a su eterno rival, el Inter de Milán, con un dramático 2-3 en Arabia Saudí. La victoria no solo marca el fin de una sequía de títulos desde el Scudetto en 2022, sino también el inicio de una nueva era bajo el liderazgo de Sergio Conceição, quien en apenas ocho días al frente del equipo ha logrado devolverle competitividad y espíritu ganador.
La revolución de Conceição
El técnico portugués llegó con una misión clara: transformar a un Milan sumido en una de sus peores crisis recientes. Y lo hizo de manera contundente. Primero, venciendo a la Juventus en semifinales con otra remontada memorable, y ahora, doblegando al todopoderoso Inter, campeón de las últimas tres ediciones del torneo. Conceição no solo ha reavivado el carácter competitivo del equipo, sino que ha demostrado que este Milan, aunque aún lejos de su mejor versión futbolística, tiene lo necesario para competir al más alto nivel.
Un Derbi della Madonnina para la historia
El Inter llegaba a la final como favorito indiscutible, con un plantel sólido y acostumbrado a los grandes escenarios. Y lo demostró temprano, golpeando en momentos clave. El primer tanto llegó justo antes del descanso, obra de Lautaro Martínez, quien rompió su sequía goleadora con una definición magistral tras una contra letal iniciada por un error de Alex Jiménez.
La segunda mitad comenzó con otro mazazo para el Milan. Taremi aprovechó una gran asistencia de De Vrij para poner el 2-0 en el marcador, lo que parecía sentenciar el partido. Pero el Milan no estaba dispuesto a rendirse.
Theo Hernández y la reacción del Milan
El momento clave llegó en el minuto 52, cuando Theo Hernández ejecutó una falta perfecta que venció al arquero Sommer, devolviendo la esperanza al equipo. A partir de ahí, el partido se convirtió en un intercambio constante de oportunidades. El Inter estuvo cerca de ampliar su ventaja, pero el Milan respondió con intensidad, liderado por un inspirado Rafael Leão.
El empate llegó gracias a la conexión letal entre Leão y Theo Hernández. Un centro perfecto del lateral encontró a Christian Pulisic, quien definió con frialdad para poner el 2-2. Con apenas 10 minutos restantes, los penales parecían inevitables.
Tammy Abraham, el héroe inesperado
Sin embargo, el Milan tenía otros planes. En el minuto 93, apareció Tammy Abraham para culminar una remontada épica con un gol que quedará grabado en la memoria de los aficionados. Con este tanto, el equipo de Conceição no solo se llevó el título, sino que reafirmó su dominio en el segundo derbi ganado al Inter en lo que va de temporada.
Una victoria que va más allá del título
El título de la Supercopa de Italia representa mucho más que un trofeo para el AC Milan. Es el símbolo de un equipo que ha recuperado su orgullo y ambición bajo la dirección de un técnico que, en tiempo récord, ha conseguido unir a un vestuario que parecía perdido. Conceição ha demostrado que el Milan puede competir nuevamente entre los grandes de Italia y Europa.
Con esta victoria, el Milan no solo rompe la hegemonía del Inter en este torneo, sino que envía un mensaje claro: el gigante rossonero está de vuelta. El reto ahora será mantener esta consistencia y llevar este impulso a la Serie A y competiciones internacionales.