Vigo, 27 oct (EFE).- El Celta de Vigo ha presentado alegaciones ante el Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol (RFEF) al acta del partido que le enfrentó al Real Madrid el pasado sábado.
En el apartado de incidencias, el árbitro aragonés Clos Gómez reflejó que el defensa celeste Gustavo Cabral «en el minuto 58, tras ser expulsado, prosiguió en sus protestas, teniendo que ser apartado por sus compañeros. En esos mismos instantes, se dirigió a mí en los siguientes términos: ¡Cagón de mierda!.
Las alegaciones del Celta no tratan de anular alguna de las dos tarjetas amarillas que Clos Gómez le mostró a Cabral -la primera por «derribar a un contrario» y la segunda por «llegar hasta mi posición gritando y gesticulando con los brazos en alto, desaprobando una de mis decisiones»-.
Los servicios jurídicos del conjunto gallego pretenden que no se tengan en cuenta las palabras que, según recogió el colegiado, el defensa argentino pronunció tras ser expulsado, por las que le podrían caer una sanción de 2 a 12 partidos.