Londres, 7 nov (EFE).- El Leicester prolongó su condición de equipo revelación de la Premier al sumar ante el Watford del español Quique Sánchez Flores una nueva victoria que le sitúa a la altura de los líderes, el Manchester City y el Arsenal, a la que aspira a llegar el United, que superó al West Bromwich.
El Leicester que dirige el italiano Claudio Rainieri es la sensación del curso. Lejos de la repercusión de los grandes aspirantes del fútbol inglés, acumula méritos jornada tras jornada.
No ha decaído el club de Leicestershire, que alcanzó la máxima categoría del fútbol inglés hace un curso. La pasada campaña, la de su asentamiento, terminó decimocuarto. En esta temporada sus miras parecen más altas.
El equipo de Rainieri sumó otra victoria. Acumula siete en doce partidos. Ha empatado cuatro y solo cuenta con una derrota. Está igualado a puntos con dos claros aspirantes a la copa. El City y el Arsenal, que jugarán sus compromisos el domingo.
Ante el Watford, recién ascendido, sumó su tercer triunfo seguido (2-1). Contó con la colaboración del meta del cuadro de Quique Flores, el brasileño Heurelho Gomes. El portero falló claramente en el primer gol y provocó el penalti que supuso el segundo.
El sueño de la afición del King Power Stadium se prolongó en el minuto 53, con el tanto del francés Ngolo Kante. El galo buscó portería sin fe, pero el meta sudamericano fue incapaz de frenar un tiro inocente que acabó en gol.
El tanto desconcertó al arquero, que pasada la hora de partido cometió una falta ante un delantero rival. El penalti fue transformado por Jamie Vardy, que asentó el buen momento local y cortó la racha del Watford, que afrontó el compromiso después de encadenar dos victorias.
El cuadro de Quique volvió a tomar el pulso al encuentro en el último cuarto de hora, gracias a un gol desde los once metros de Troy Deeney. Sin embargo, fue incapaz de puntuar en Leicester.
El Manchester United, por su parte, está al acecho. A un paso de los líderes, cumplió en Old Trafford con la visita del West Bromwich Albion (2-0).
Tras dos encuentros sin ver puerta, frente el City (0-0) y el Crystal Palace (0-0), se reencontró con el gol el equipo de Louis Van Gaal, que no desatascó el choque hasta la segunda parte. Fue por medio de Jesse Lingard, en el minuto 52, que logró, además, su primer gol oficial con la primera plantilla red.
El partido no será olvidado por el juvenil Cameron Borthwick-Jackson, de 18 años, que debutó con el primer equipo ‘red’. Ocupó el lugar del argentino Marcos Rojo para jugar el último cuarto de hora. No le pesó la responsabilidad a la joven promesa inglesa, que contempló cómo su equipo cerraba el triunfo, en el tiempo añadido, gracias a un penalti transformado por el español Juan Mata.
El West Bromwich pagó así la zancadilla de Gareth McAuley al francés Anthony Martial. El zaguero visitante vio la tarjeta roja y dejó a su equipo con diez.
El West Ham es otra de las buenas noticias del curso en la Premier. Aunque pierde gas el combinado que entrena el croata Slaven Bilic, que en Boleyn Ground no pudo con el Everton del español Roberto Martínez (1-1).
Se aleja de la parte alta el combinado londinense, que se puso en ventaja gracias a un extraordinario gol del argentino Manuel Lanzini a la media hora. El sudamericano envió un tiro preciso y colocado desde el borde del área inalcanzable para el estadounidense Tim Howard.
Sin embargo, antes del descanso empató el equipo de Liverpool. Fue en una acción del español Gerard Deulofeu, que ejecutó un pase al espacio al belga Romelu Lukaku, con metros por delante. Aprovechó su velocidad el atacante, que se deshizo de dos defensas y del meta español Adrian. Estableció una igualada inamovible que alimenta la autoestima del Everton.
El Norwich no vio claro el triunfo hasta el tramo final. Sacó los tres puntos contra el Swansea (1-0), gracias a un gol de Jonathan Howson, que culminó un pase del congoleño Dieumerci Mbokani.
El Southampton alimentó las penurias del Suderland, donde venció beneficiado por un penalti transformado por el serbio Dusan Tadic en el minuto 69.
Finalmente, un gol del español Ayoze Pérez dio la victoria en Bournemouth al Newcastle (0-1), que le saca de los puestos de descenso de la Premier, en el encuentro que abrió la duodécima jornada.
El tanto del atacante canario, antes de la media hora, devuelve a las ‘urracas’ a la senda del triunfo después de empatar con el Stoke City y la derrota encajada frente el Sunderland.
El Bournemouth, recién ascendido, careció de capacidad de reacción y cae a la antepenúltima plaza, donde estaba instalado su rival antes del partido.