Roma/Madrid, 23 mar (EFE).- Italia y España protagonizan en Udine un atractivo amistoso entre dos de las candidatas al título de la próxima Eurocopa de Francia, en una vara de medir del estado de la Roja en su primer encuentro de 2016, el año en el que sueña con volver a hacer historia y convertirse en la primera selección que conquista tres europeos de forma consecutiva.
La recta final hacia un nuevo reto de la Roja se inicia en Udine. Como ocurrió antes del Mundial de Brasil, la última prueba antes de la lista definitiva de Vicente del Bosque para la Eurocopa 2016 será Italia. Aquel último enfrentamiento de un duelo convertido en clásico europeo, en marzo de 2014, fue el merecido homenaje en el Vicente Calderón a la figura de Luis Aragonés y confirmó la tendencia de los duelos en los últimos años. Triunfo español con tanto de Pedro Rodríguez el día del estreno de Diego Costa.
Es una de las grandes ausencias del partido en Udine y una de las principales dudas por despejar de cara a la Eurocopa. El rendimiento deportivo de Aritz Aduriz y sus goles con el Athletic Club, han acabado dejando de lado su DNI y los 35 años que figuran en él, para que Del Bosque le conceda la oportunidad merecida. Con Álvaro Morata y Paco Alcácer con el puesto asegurado todo parece destinado a un pulso Costa-Aduriz en la plaza de tercer punta de la lista final.
Regresa España a una ciudad donde dejó una de las imágenes para la colección histórica de sus fotografías. La protagonizó José Miguel González Martín del Campo, ‘Míchel’, un 17 de junio de 1990 con su celebración en el triplete a Corea del Sur. «Me lo merezco», gritaba en plena reivindicación.
Eran otras épocas en la selección española que ante Italia espantó para siempre los fantasmas en las grandes citas. Los penaltis que destrozaron la barrera de cuartos ante Italia en la Eurocopa 2008, el impulso según todos los jugadores hacia el título. Y la exhibición en la final de Kiev en 2012. En los últimos 21 años una sola derrota de la Roja en diez encuentros igualan al máximo los enfrentamientos. 33 duelos y diez victorias para cada selección.
Buscará seguir la racha el equipo de Del Bosque que pierde dos jugadores claves en su centro del campo. Las bajas de Sergio Busquets, por una luxación en un dedo, y Andrés Iniesta, con problemas musculares, abren posibilidades de prueba. Puede partir con un sustituto natural en la zona de medio centro destructivo, San José, o arrancar con Koke Resurrección junto a Cesc Fábregas.
Tampoco estará por lesión Santi Cazorla, habitual variante del seleccionador. Su ausencia abre la puerta a la ganancia de confianza de Thiago Alcántara, figura que se perfila importante en la cita veraniega de Francia. Parecen fijos en el once Juanfran, Piqué, Sergio Ramos, Jordi Alba, Cesc, Silva, Pedro y Morata.
Quién sabe si será el último duelo de dos leyendas en la portería. Iker Casillas y Gianluigi Buffon se han ganado a pulso estar entre los mejores porteros de la historia. Respeto y admiración entre dos deportistas que lo han ganado todo, han sido imagen de sus selecciones durante décadas y comienzan a ver de cerca el final en la elite. Buffon sigue siendo indiscutible en Italia; Casillas necesita buenas actuaciones con España que frenen el debate con David De Gea y le afiancen como titular en la Eurocopa.
Mientras, Italia encara en Udine ante España su primer amistoso del año antes de la Eurocopa de junio sin poder contar con muchas piezas fundamentales de la plantilla, como Giorgio Chiellini, Andrea Barzagli o Marco Verratti, que no han podido recuperarse de sus respectivas lesiones.
El seleccionador Antonio Conte tendrá que reinventar el once de los «Azzurri», sobre todo en defensa, ya que Andrea Barzagli dejó la concentración por un problema muscular y su baja se suma a la de su compañero en el Juventus Giorgio Chiellini, otro titular fijo. Daniele Rugani, también blanquinegro, ha sido convocado para sustituirle.
Además, tampoco el medio Marco Verratti y el exdelantero del Sevilla Ciro Immobile estarán en el partido del jueves. El primero no pasó el reconocimiento médico ya que no se ha recuperado completamente de un problema al pubis; el segundo se lesionó en el derbi del domingo ante el Juventus y será reemplazado por Stefano Okaka.
Así, Conte, que cambió hasta tres sistemas tácticos desde que llegó a la selección italiana y que aseguró en la rueda de prensa del lunes que las novedades «todavía no han terminado», podría apostar por un 3-4-3, con Leonardo Bonucci, Matteo Darmian y Davide Astori (favorito sobre Francesco Acerbi), que actuarán por delante del arquero Gianluigi Buffon.
El centro del campo será inédito, ya que, además de Verratti, faltan también Daniele De Rossi y Claudio Marchisio, que todavía no están al máximo de la condición y no han sido convocados. Thiago Motta, que vuelve tras dos años de ausencia, y Marco Parolo deberían formar el doble pivote, con Alessandro Florenzi y Luca Antonelli en los dos carriles de banda. Y en la delantera Graziano Pellé y Eder saldrán desde el comienzo en un tridente ofensivo que podría completarse con el último fichaje del Roma Stephan El Shaarawy, que vive un gran momento de forma.
El amistoso contra España, expresamente pedido por Conte, supone para Italia una importante oportunidad para medir su propio potencial de cara a la próxima Eurocopa y entender, según aseguró el seleccionador, si el trabajo realizado hasta ahora ha dado sus frutos. Será su primer partido en el nuevo estadio Friuli, la casa del Udinese y la tercera instalación de propiedad de un club de Serie A tras el Juventus Stadium y el Mapei Stadium, del Sassuolo. En el viejo estadio, Italia disputó seis partidos consiguiendo cinco victorias y un empate.
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Alineaciones posibles:
Italia: Buffon; Darmian, Bonucci, Astori; Florenzi, Parolo, Thiago Motta, Antonelli; Eder, El Shaarawy, Pellé.
España: Casillas; Juanfran, Piqué, Sergio Ramos, Jordi Alba; San José o Koke, Thiago Alcántara, Cesc Fábregas, Silva, Pedro y Morata.
Árbitro: Deniz Aytekin (ALE)
Estadio: Friuli.