Este viernes 12 de julio, luego de muchos dimes, diretes y las expectativas por ver quién y cuándo se pagaría la cláusula de recesión que existía en su contrato con el Atlético de Madrid; el Barcelona confirmó eso que muchos estaban esperando. Griezmann se une a la azulgrana.
Luego de que Griezmann no apareciese en la pretemporada del Atlético , los rumores de su pronta llegada al club catalán se intensificaron. Los rojiblancos se molestaron con las acciones de este y confirmaron que habían estado en conversaciones con el Barcelona; pero, como nadie había pagado nada, les disgustaban las acciones del club y las del principito del fútbol.
Ambos atacados hicieron caso omiso y siguieron con los arreglos, llegando a proponer el francés en pagar él mismo la cláusula de 120 millones de euros. Aunque fue el Barcelona quién finalmente dio el dinero; en la mañana del viernes 12, el abogado de Griezmann fue visto entrando a las oficinas de LaLiga en Madrid, para hacer el pago.
Con un comunicado lanzado en su página y otras confirmaciones en sus redes, la blaugrana oficializó el fichaje del delantero. Anunciando, además, que este firmará un contrato para las próximas 5 temporadas, hasta el 30 de junio de 2024.
El delantero de 28 años, que podría ser presentado en el Camp Nou a puerta cerrada durante el fin de semana, tendrá ahora una clausula de recesión que excede por bastante a la que tenía en un inicio con los colchoneros; de 200 millones de euros. Pues, como anunciaron también en su comunicado, en el Barcelona la cláusula de recesión de Griezmann será de 800 millones de euros.
Sin embargo, parece que la novela de este fichaje que se hacia esperar desde el 2018, no termina aquí; pues se comenta que el Atleti quiere demandar a la blaugrana pues cree que pagaron menos de lo que deberían, reclamando que las conversaciones entre el club y el francés comenzaron antes de que la clausula de recesión disminuyese; comentando:
«El Atlético de Madrid considera que la cantidad depositada es insuficiente para hacer frente a su cláusula de rescisión; puesto que es obvio que el compromiso del jugador y del Fútbol Club Barcelona se cerró antes de que la citada cláusula se redujera de 200 a 120 millones de euros. También fue anterior a la fecha en la que se produjo la modificación de la cláusula la comunicación que el jugador realizó el 14 de mayo anunciando su desvinculación del club.»